Juana de
Arco, nació en un pueblecito de la región de Lorena, el 6 de enero del año
1412. Por entonces en Francia se desarrollaba la que se llamó ‘La guerra de los
cien años’ contra las tropas inglesas que intentaban conquistar el territorio,
pero a pesar de la guerra, Juana vivió una infancia feliz y tranquila al lado
de sus padres y sus cuatro hermanos.
A los catorce
años Juana empezó a tener visiones sobre ángeles y a escuchar las voces de dos
santas: Santa Catalina de Alejandría y Santa Margarita de Antioquía.
Primeramente, Juana ocultó esto a sus padres, pero entonces las voces le
enviaron un mensaje claro: debía ir con un ejército francés para alejar a las
tropas inglesas de la ciudad de Orleans, donde la resistencia francesa
aguantaba desde hacía mucho los ataques del ejército inglés.
Juana se
decidió a aceptar su destino y viajó hasta una población cercana a su pueblo
natal Domremý. En ella se encontraba Roberto de Baudricourt, quien era
comandante de los ejércitos reales.
Roberto
rechazó varias veces las peticiones que Juana de Arco le hacía, pero se dio
cuenta de que ella podría ser la última esperanza después de tantos años de
guerra contra los ingleses, así que la envió para que se entrevistara con el
futuro rey Carlos VII de Francia.
Cuando fue
recibida por el futuro rey, él la puso a prueba: antes de que Juana llegara se
escondió entre la multitud y colocó a un miembro de la realeza en su lugar.
Según el rumor, Juana reconoció al verdadero Carlos VII y después de una
entrevista privada, él le concedió un ejército francés.
Juana se
marchó para luchar en Orleans con su ejército y allí salió victoriosa.
Gracias a las
victorias de Juana, el 17 de julio del año 1429 el rey Carlos VII fue coronado
como rey de Francia.
Cuando llegó
a rey, sus intereses y los de Juana empezaron a diferenciarse. Carlos VII
pretendía finalizar la guerra con tratados de paz, pero Juana quería seguir luchando.
En su última
batalla fue capturada y juzgada por los enemigos, pero el rey Carlos VII se
abstuvo de salvarla. El 30 de mayo del 1431 murió acusada de cargos falsos.
Siglos más
tarde su caso fue revisado y fue declarada santa y también patrona de Francia.
1 comentario:
Una mujer muy intrepedia me ha gustado su historia
Publicar un comentario